Mirando el fuego como quien mira una espera, recuerdo el tabaco que relegué hoy mas temprano. Voy por ti mi hermano.
Quito la molesta anilla de importación que siempre intenta lastimar la capa de mis tabacos. Otra vez le gano. Mi capa ilesa.
De fondo suena "Deixa eu Dizer" un clásico de la música brasileña que me recuerda a mi Brasil natal en donde aún no nací, pero que siempre estuve. Estoy ahí hoy más que nunca.
Disfruto del tiro en frío de mi Quai... Por Dios, qué locura. Creo que le di unas diez bocanadas. Tierra húmeda, hierbas y heno. Fabuloso, único.
Continúo mentalmente en Brasil aunque me llame Cuba desde su tabaco premium. Hasta concluí en un momento que estaba con un charuto entre mis dedos. Y si, que hay de distinto ( no me peguen). Lo se, hay diferencia pero hoy no es el caso.
El fuego me pide otro leño, pero primero quiero encender mi habano. Me encanta en primera medida tostar el pie y sentir es rico olor a quemado. Continúo luego jugando con el borde y mi soplete. Qué hermosa sensación, saben de que les hablo.
Listo, encendido. Ahora si arrimo un quebracho blanco al fogón.
Lo demás... quien no fumó alguna vez un Quai D´orsay Nu 50
Qué vuelen los humos!!!! y déjenlos volar!!
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